Secuencias
La aparición contigua de dos elementos vocálicos en la cadena hablada da lugar a hiatos o diptongos, según sea su pronunciación heterosilábica u homosilábica. Siempre ha existido una tendencia hacia la reducción vocálica, tanto en los hiatos como en los diptongos. Son asimismo frecuentes las secuencias vocálicas secundarias, producidas por la pérdida de determinadas consonantes intervocálicas (fundamentalmente [β̞, ð̞, ɣ̞, ɾ]).
La mayor parte de los diptongos corresponde a secuencias decrecientes, como [ei̯], [eu̯], [ai̯], [au̯], [oi̯] o [ui̯], entre otras. La ausencia de diptongos crecientes ha sido un rasgo tradicional de la lengua; en su lugar se producían hiatos, epéntesis consonánticas o reducciones; no obstante, la presencia de los diptongos crecientes es cada vez más frecuente.
Las ocurrencias de los hiatos pueden ser de diferente índole: en interior de elemento léxico, por derivación y composición, en formas verbales, etc.; en estas realizaciones el hiato o sus resultados son, en general, fijos. Otro tipo de hiato es el producido por la adición de un morfema a una base lexemática o verbal; en tales casos, el uso de dicho morfema es opcional y, por tanto, también la aparición del hiato y sus distintas realizaciones diatópicas. En este último grupo destacan las secuencias producidas por la juntura del determinante [-a] con cada una de las vocales en posición final de palabra: [-ia], [-ea], [-aa], [-oa], [-ua] y también [-ya] para el suletino; estas secuencias registran una gran variedad de resultados, de modo que incluso pueden registrarse casos de polimorfismo, tanto social como individual, en una misma localidad.